Una de mis amigas, me comentó que está batallando, con un libro que a pesar de ser de mis favoritos, también me costó sangre, sudor y lágrimas. Otro clásico, pero muy clásico. Indispensable en cualquier biblioteca, principalmente, porque es uno de esos títulos que te toca leer en la preparatoria o en la secundaria.
La mitología me apasiona, recuerdo los cuentos que me contaban mi papá y mi abuelo paterno, que también se sabía varios relatos. Nos podían tener embobados escuchando las peripecias de Perseo, Hércules y los deslices del más temible de todos los dioses, el enamoradiso Zéus.
La Ilíada, La Odisea y La Enéida, son historias llenas de las intervenciones de los dioses griegos sobre la vida de los pobres mortales, que básicamente se encuentran a sus expensas y cambios de humor. El formato no es el más cómodo desde luego, tenemos que recordar que son obras aproximadamente del siglo VIII A.C.
Pero los cuentos son maravillosos y no por nada, clásicos. Ahora, aquí sólo trataré La Ilíada, la increíble historia de la guerra de Troya. Como muchos saben, ésta guerra fué ocasionada gracias a que el joven príncipe de Troya, Páris decide raptar a Helena, esposa de Menelao.
Debo aclarar, que en la Ilíada, todo parte a raíz de que el Rey de Esparta, hermano de Menelao, Agamenón, le quita al héroe de la historia, Aquiles (y su ¡maldito talón!) a su preciada y bellísima esclava Briseida.
Ahí es en donde de verdad se pone la cosa acalorada. Los dioses juegan papeles importantísimos, generan situaciones, pelean entre ellos, toman partido entre Troyanos y Espartanos, intrigan y manipulan, de modo que todo se convierte en una competencia campal y obviamente, los humanos terminamos más atropellados que otra cosa.
¿Recuerdan Troya? ¡Ah, si! Para allá voy... Troya, ¡Mira lo que son las cosas! nuevamente de Wolfgang Petersen, el mismo de La Historia Sin Fin.
Todos en la baba, sorprendidos por una mega-producción, los bísceps de Brad Pitt como Aquiles y de Eric Bana como el honorable Héctor. Pero, si entramos en labor de desmenuzar la adaptación, vamos a terminar con un fragmento de La Iliada.
¿Recuerdan a Tetis, la madre de Aquiles? Bueno, ella es la única, digamos sobrenatural que aparece como representación de todas las deidades, ni más ni menos que una nereida o ninfa del mar, y sólo la vemos recogiendo conchitas anticipándole a su hijo lo que traerá la tan mentada guerra.
¿Qué sucedió? Nadie lo sabe. Troya no es más que un exceso de efectos especiales, bronceadas piernas masculinas, malas actuaciones y el presuntuoso intento de imponer récords en la pantalla grande.
Una verdadera pena, lástima, teniéndo una epopeya monumental se conformaron con poco, malo e inventado.
Espero comentarios. Salu2.
hola..!
ResponderEliminarkreo ke la amiga la ke mencionas
en tu publicacion, soy yo hehehe
y si soy yo ps... siiiiiii se me sta complicando
un poco la ilíada, pero ahi la llevo
poco a poco voy comprendiendo
mas y mas, y con respecto a la peli d troya
ps a mi en lo personal
se m hizo buena como peli
pero nada ke ver con el libro
el lirbo es un derroche d literatura
y en la peli "basada en la obra literaria" según, ps sinceramnt se kedaron extremadamnte cortooos, pero la salvamos por ke salen 3 papasitos Eric Bana, Orlando Bloom, y el tremendo Brad Pitt.
gracias amiga..! excelente tu publicacion
como siempreeee ke buena forma d escribir
aTTe: Becks..!
Claro que me refería a tí. ¿Quién más se puede pelear con un libro, si no tú? jajajaja.
ResponderEliminarMe da mucho gusto que no hayas dejado la lectura, sé que no es fácil, pero como bien dijiste, es un derroche de literatura.
Besos y salu2.