Porque el que es lindo, es lindo... y el que no, púes no.

Y miren que lindo es y mucho. Pero a veces, no hay que juzgar por las apariencias. Curiosamente, para la adaptación de ésta novela, esperé y esperé por una buena presentación y nada más no me encontraba nada que me satisficiera. Ví una vez una serie inglesa y me pareció lo mejorcito, pero no lograba gustarme del todo.

La espera valió la pena,tampoco debo exagerar las cosas. La versión nueva de "El Retrato de Dorian Gray" (que sólo nombraron Dorian Gray), desde luego me ha parecido buena, aun que con ciertas diferencias en la trama original, que me dejaron algo contrariada. Quizás porque ha sido una de mis novelas favoritas, una de las que más veces he leído y que curiosamente tuve que comprar nuevamente porque mi primera copia estaba tan desgastada y maltratada que la cara de "Dorian", que aparece en la portada, estaba dañadísima.

Cuando leí por primera vez "El Retrato de Dorian Gray", por recomendación de mi papá, tendría como catorce años. Me impactó mucho, primero porque no tenía mucha experiencia en las novelas "adultas", con temas tan fuertes como los asesinatos, las intrigas, las perversiones, las relaciones tortuosas... bueno, las relaciones tortuosas sí, nada peor que "Romeo y Julieta", pero bueno, el hecho fue que marcó un momento importante en mi educación literaria.

Recuerdo que el personaje de Sibyl Vane me cayó "como patada de mula", pensaba "¿Cómo puede una persona ser tan cursi?"...y éso que tenía catorce, que conste... la aborrecí y cuando supe en qué paró el destino de la Vane, me alegré de no tener que leer otra vez sus tan melosos y trillados comentarios. Ahí sí,me puse de lado de Lord Henry Wotton.

Para mi fortuna, la adaptación realizada por Oliver Parker el año pasado, resultó mucho mejor de lo que esperaba, a pesar de los cambios que le hicieron a la historia. Por fortuna, los personajes fueron más sólidos, los reforzaron, en algunos casos, como en el de mi aborrecida Sibyl, le dieron una personalidad menos banal, más íntegra y desde luego, éso logró que sintiera empatía hacia ella y por ende, deseara que a Dorian le cayera el cuadro encima  y al menos le fracturara la nariz, cuando la traiciona. La ambientación me quedó a deber, algunas escenas se ven como acartonadas. Las actuaciones fueron muy buenas, el vestuario es excelente, la música no es maravillosa pero me gustó a secas. El final es tan diferente al original, pero para mi gusto muy bien justificado que no me puedo quejar por la alteración.

Ya está, otra vez los ingleses hacen lo que se les da la gana conmigo, ése niño Barnes no está para nada despreciable, no por nada lo escogieron como Dorian Gray y me dió gusto verlo actuar tan bien, me convenció tanto en su etapa inocente, en la perversa y en la martirizada, muy bien hecho. El retrato (que es finalmente un personaje importantísimo) fue justo como lo imaginé, la transformación que sufre con todo y sonidos, me pareció adecuada.

Bueno mis amigos, no me resta más que despedirme dejando lo de siempre, más un cómic en serie que Marvel sacara, la radio novela y toda la intención de colgarles otra entrada al menos, para cerrar el mes. Beso y salu2.